Suárez, ansioso por medirse a Inglaterra










Desde el momento en que el bombo del sorteo de la fase final de la Copa Mundial de la FIFA™ deparó el pasado mes de diciembre de 2013 un enfrentamiento entre dos campeones del mundo como Uruguay e Inglaterra, Luis Suárez ha estado en el centro de todas las miradas. Dos días antes, el ariete del Liverpool se había lucido en el estadio de Anfield marcándole nada menos que cuatro goles al Norwich City.

Aquella tarde, los jugadores ingleses del Liverpool celebraron con regocijo los tantos del delantero nacido en la localidad uruguaya de Salto, pero, menos de 48 horas más tarde, Steven Gerrard, Jordan Henderson y compañía ya se preguntaban cómo se las iba a arreglar Inglaterra para parar a un jugador que en la temporada 2013/14 volvió locas a las defensas de la Premier League.

Sin embargo, Suárez estuvo a punto de quedarse sin Copa Mundial de la FIFA. No en vano, una operación de rodilla unas semanas antes del inicio de Brasil 2014 puso en riesgo la participación del ariete en el certamen. Al final, la falta de forma obligó al talismán de la selección uruguaya a contemplar impotente desde el banquillo la derrota de los pupilos del técnico Óscar Tabárez en la primera jornada del Grupo D a manos de Costa Rica, que se impuso por 3-1 después de remontar un gol en contra.

“Lógicamente, la ausencia de Luis sería una buena noticia para nosotros, porque se trata de un jugador fantástico”, declaró a la FIFA Henderson, compañero de Suárez en el Liverpool. “En cualquier caso, no me cabe duda de que Luis está ansioso por jugar y de que está haciendo todo lo posible para no perdérselo. Uruguay es un gran equipo, así que lo que debemos hacer es centrarnos en el partido, recuperarnos bien y prepararnos lo mejor posible”, añadió.

El centrocampista del Liverpool, que fue titular en la derrota de Inglaterra a manos de Italia el pasado sábado, recalcó que el combinado inglés debe aprender de los errores de cara al duelo frente a Uruguay: “Podemos sacar muchas cosas en limpio. Tenemos que mantener la confianza, seguir creyendo y centrarnos en el próximo partido”.

Sturridge y Suárez, frente a frente
Después de una primera jornada en la que ingleses y uruguayos perdieron sus respectivos partidos, el duelo entre ambos se presenta decisivo. Suárez se ha declarado disponible “al cien por cien” para enfrentarse a Inglaterra en São Paulo el jueves. “Me siento estupendamente”, aseguró Suárez a la FIFA. “Estoy muy motivado para volver a jugar. Me siento mejor y más fuerte que antes y creo que estoy listo para intentar darle la vuelta a la situación”, añadió.

La voluntad de contribuir a que los vigentes campeones de Sudamérica sigan vivos en la competición mundialista pesa más que cualquier deseo de brillar ante la selección del país donde Suárez reside la mayor parte del año. “Está claro que será especial, porque es el país donde juego y conozco a todos los jugadores. Sin embargo, las ganas de reivindicarme no me afectarán, porque ya juego en Inglaterra el resto del año y no tengo nada que demostrar a nadie”, explica el ex delantero del Ajax.

El discurso que predomina en la concentración rival refuerza la idea de que los pupilos de Roy Hodgson no pueden centrarse exclusivamente en Suárez, máxime cuando Tabárez cuenta con más delanteros de gran categoría. Por su parte, el seleccionador inglés dispondrá del olfato goleador de Daniel Sturridge, el acompañante de Suárez en el ataque del Liverpool, que ya marcó en la jornada anterior en el que fue su primer partido en una Copa Mundial de la FIFA.

“Jugaremos de la misma forma esté o no esté Luis”, afirmó Sturridge. “Es un jugador de clase mundial, pero estamos hablando de Uruguay, que también tiene a Cavani y a Diego Forlán, todo un histórico, además de a otros jugadores de mucha calidad que pueden resultar muy peligrosos. Nos preocupa el equipo rival, no sólo Luis”, añadió.

En su conversación con los periodistas de la FIFA, Suárez hizo hincapié en que conoce bien las cualidades de Inglaterra, así que no resultaría descabellado pensar que al final sea algo inesperado lo que acabe decidiendo el duelo que tendrá lugar en el Arena Corinthians.