Uruguay derrotó a México 1 a 0 con gol de Luis Suárez y ganó el Grupo A de la Copa del Mundo con 7 puntos, seguido por los aztecas con 4, tercero Sudáfrica también con cuatro pero con menor saldo de goles, y último Francia con 1.
México comenzó teniendo más la pelota y yendo en busca del gol. Pero Uruguay se defendía bien y controlaba el partido.
Con los mexicanos volcados a la ofensiva, y desatentos en defensa, Uruguay aprovechó para tener las oportunidades más claras de gol. La primera fue de Luis Suárez, que aprovechó una falla en la defensa para quedar mano a mano con el arquero Oscar Pérez, pero definió desviado.
También pudo abrir el marcador Mauricio Victorino, que ganó por arriba en el área de México y el cabezazo se fue por encima del palo. Y después Álvaro Pereira entró por la izquierda, demoró para definir y cuando fue a patear su disparo salió mordido y desviado.
A la siguiente jugada México tuvo su oportunidad, Andrés Guardado ganó una pelota dividida, pateó al arco desde 30 metros y la pelota reventó el travesaño.
Parecía que había pasado el momento del partido de Uruguay, que ya se había gastado todas oportunidades de gol, pero todavía le quedaba una. Edinson Cavani desbordó por la derecha, lanzó al centro al segundo palo, entró solo Luis Suárez y puso el 1 a 0.
El segundo tiempo fue más táctico pero con menos oportunidades de gol que el primero. México atacaba pero nunca logró apabullar a la defensa celeste. Uruguay se defendió con mucho oficio y sólo tuvo un error en el fondo, dejando cabecear en el área a Francisco Rodríguez. La pelota pasó a centímetros del palo.
Uruguay también tuvo la suya. Diego Lugano ganó por arriba tras un tiro libre pero el cabezazo lo atajó el "Conejo" Pérez.
No hubo mucho más. Los mexicanos no supieron cómo abrir la defensa celeste y en los minutos finales, desesperados, pegaron y hablaron demasiado, y pudieron tener algún expulsado.
Uruguay ganó el Grupo, algo que no ocurría desde1954, y jugará contra el segundo del Grupo B, que podría ser Grecia, Corea del Sur o Nigeria (es casi seguro que Argentina será el primero).
Los optimistas dejaron de ser unos locos soñadores. Los celestes hicieron historia y ya sueñan con ganarse un lugar entre los ocho mejores del mundo.